Se trata de uno de los conjuntos urbanísticos más armoniosos, espectaculares y característicos de la Roma barroca, delimitada por edificios que surgieron sobre los restos del estadio de Domiciano (“Circus Agonalis”, Circo Agonal). El circo fue construido bajo la orden del emperador Domiciano en el año 86, y restaurado por Alejandro Severo, con espacio para más de 30.000 espectadores. La plaza conserva la forma y dimensiones (aproximadamente 240 x 65 m) de la pista. El nombre deriva, por corrupción de los juegos agónicos (juegos griegos)-de gimnasia o competición- que se desarrollaban en el estadio (in agone, nagone, navone, navona). Hasta mediados del siglo XIX, cada verano se cerraban los desagües de las tres fuentes y la parte central de la plaza se inundaba para convertirse en "El Lago de la Plaza Navona".
A finales del siglo XVII, durante la época del Papa Inocencio X, cuando este rincón de Roma adquirió la actual configuración arquitectónica barroca.
Palazzo Pamphili
En el lado oeste de la plaza se encuentra el Palazzo Pamphili, construido entre el 1644 y el 1650, para la familia del Papa Inocencia X, quizá de ahí que buscara hermosear la plaza, convertiéndola en una de las más imponentes y sin duda un referente del estilo barroco en Roma. La plaza, con auspicio de Inocencio X, servía de escenario para espectáculos teatrales, ecuestres e incluso en los meses de verano se inundaba para recreación de la gente de las altas esferas . Su interior está decorado con frescos que representan típicamente el gusto del s.XVII romano. Actualmente es la embajada del Brasil.
Basilíca de Santa Agnese in Agone, Basílica de Santa Inés en Agonía
Se encuentra a la derecha del palacio Pamphili. En un primer momento, estaba concebida como capilla del palacio Pamphili, con el que está comunicada. Es de estilo barroco siendo construida en el siglo XVII, los primeros encargados de su construcción fueron Girolamo Rainaldi y Carlo, su hijo en 1652, quienes después fueran sustituidos por Francesco Borromini para 1653, derruyendo la fachada anterior y proyectando la nueva fachada cóncava, para 1657,así como la la cúpula y los campanarios, en el interior, en forma de cruz griega, Borromini mantuvo la estructura original, enriqueciéndola con su decoración e inventiva. Posteriormente Bernini haría lo propio en el interior con un decorado ornado y de estilo barroco. Éste templo fue construido en lo que antiguamente sirvieran de gradas en el estadio de Domiciano, hubo también con anterioridad una iglesia del siglo VIII. Sobre la puerta, se encuentra el sepulcro del Papa Inocencio X (1644-1655). Al elegir una decoración principalmente escultórica, hoy día la iglesia constituye una muestra representativa de este arte durante el s.XVII. Según la leyenda, fue el sitio donde Santa Inés fuera martirizada y obligada a desnudarse en público, momento en el que se produjo el milagro, creciéndole el cabello hasta cubrir su cuerpo. Lo que le valió el reconocimiento de la iglesia como una mártir más. Se puede apreciar en la fachada una figura de la santa en modo de oración, mientras soporta el martirio, ésta escultura obra de Ferrata, para 1660.
LAS FUENTES DE LA PLAZA NAVONA
A los extremos de la Piazza Navona encontramos, las tres fuentes construidas bajo el mandato de Gregorio XIII Boncompagni, la “Fontana di Neptuno” y la “Fontana del Moro”, ambas obra y diseño de Giacomo della Porta, proyectadas en 1574 y 1576, respectivamente. Aunque cada una de ellas tiene elementos añadidos en años posteriores, Neptuno por Antonio della Bitta y las nereidas de la autoría de Gregorio Zappala, hacia el siglo XIX y la figura del moro y el delfín, realizadas por Bernini en 1653.
Fontana dei Quattro Fiumi
En el centro de la Plaza Navona se encuentra la Fontana dei Fiumi o "Fuente de los Cuatro Ríos", construida por Bernini en 1651. Las cuatro estatuas de la fuente representan a los cuatro ríos más importantes de la época: el Nilo, el Ganges, el Danubio, y el Río de la Plata. Las colosales estatuas son obra de discípulos de Bernini: Fancelli, Poussin, Raggi y Baratta, respectivamente. En el centro está situado un obelisco de 16 metros de altura que perteneció al Circo de Majencio, que fue encontrado en la Vía Apia, en cuya punta se ve una paloma de bronce de 1.78 m, emblema de los Pamphili, la familia del Papa Inocencio X. Cabe mencionar, que debajo de éste, Bernini dejó un hueco a posta, para dar la ilusión óptica de que se halla suspendido en el aire.
La rivalidad entre Bernini y Borromini, autor de la adyacente iglesia de Santa Inés, hizo surgir la leyenda de que el Río de la Plata levanta la mano para protegerse de la inminente caída de la fachada de la iglesia; y el Nilo tiene los ojos vendados para no ver los errores de la arquitectura borrominiana; a su vez, Santa Inés -en la base del campanario de la derecha de la iglesia- asegura con la mano en el corazón que la fachada no caerá. La verdad es que la construcción de la fachada y de la cúpula de la iglesia se inició cuando la fuente estaba ya terminada.
Fontana del Moro
Se encuentra a la izquierda, al sur, frente a Palazzo Pamphili, así llamada por la figura del etíope que lucha contra un delfín. Creada por Giacomo della Porta y perfeccionada por Bernini, que posteriormente añadió los delfines, la Fuente del Moro fue conocida en sus inicios como la "Fuente del Caracol".
Fontana del Nettuno
En el extremo norte de la plaza se encuentra la Fontana del Nettuno, obra original de Della Porta (1576), pero permaneció en el abandono desde su creación hasta 1873, momento en el cual se agregaron las esculturas de Della Bitta (Neptuno lucha contra el pulpo gigante) y de Zappalà.
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