viernes, 15 de marzo de 2024

ROMA (I): COLISEO DE ROMA O ANFITEATRO FLAVIO

El Coliseo de Roma, llamado en la antigüedad Anfiteatro Flavio, es el anfiteatro más grande construido durante el Imperio Romano y el monumento más impresionante de Roma. Originalmente recibió el nombre de Anfiteatro Flavio en honor a la dinastía de emperadores que lo mandó construir.

Se encuentra entre el Esquilino, el Celio y el Palatino y es el monumento más representativo de la Roma clásica, iniciado por Vespasiano en el 72 d.C, en el lugar donde antaño surgiera el lago artificial de la neroniana Domus Aurea y se terminó en el año 80 d.C. durante el mandato del emperador Tito, para sustituir a un anterior anfiteatro que había sido destruido por el Gran Incendio de Roma del año 64. Tras la finalización de la construcción el Coliseo se convirtió en el mayor anfiteatro romano.

El Coliseo de Roma en cifras

Tiene unas dimensiones de 188 metros de longitud, 156 metros de anchura. La estructura exterior es totalmente de travertino, y está distribuida en 4 pisos con una altura de 48,50 metros y una extensión de aproximadamente 19 mil metros cuadrados. Los bloques de la base de los pilares son de dos metros cúbicos cada uno y pesan 5 toneladas. Los tres primeros pisos están formados por 80 arcos de medio punto divididos por pilastras en las que están adosadas semi-columnas que siguen la secuencia canónica de los estilos: el primer piso ide 10,50 metros, con semicolumnas de estilo dórico; el segundo de estilo jónico, y el tercero piso de 11,60 metros de altura, tiene columnas corintias. El cuarto piso es de pared llena con pilastras corintias salientes de la pared y con pequeñas ventanas. En este punto se encontraban las sujeciones para el velum o toldo de lona que se utilizaba para proteger a los espectadores del sol. Los 240 mástiles, con sus correspondientes anclajes desplegaban el toldo para evitar la lluvia o el calor estival. Para semejante despliegue técnico se recurría a la fuerza bruta de aproximadamente mil marineros de la flota imperial del Miseno (se calcula que el peso de la tela podía alcanzar fácilmente las 24 toneladas), que procedían a estirar la cubierta. La cávea o graderío interior, se dividía en cinco sectores superpuestos, que correspondían a diferentes clases sociales, y las plazas eran fijas ya que la entrada era gratuita.

La arena elíptica del Anfiteatro Flavio, que mide unos 77 metros por 46, estaba formada por un tablero de madera recubierto de arena. Bajo este entramado se encontraban galerías concéntricas con celdas y vestidores, de donde emergían los gladiadores y las bestias a través de rampas y trampillas con sofisticados sistemas de poleas que hacían la vez de elevadores. Para acceder existían dos ingresos: al oeste la “Porta Triumphalis”, por donde entraban los gladiadores y los animales, y al este la “Porta Libitinensis”, donde salían los cuerpos sin vida de los luchadores.

El aforo del Coliseo de Roma estaba entre 45.000 y 55.000 espectadores, que entraban y salían accedían al Coliseo por 80 entradas de las que 76 vomitorium o entrada estaban numerados, y a las gradas por unos 250 vomitorios. Los asientos se distribuían en cinco niveles: los cuatro principales estaban reservados: uno a la corte imperial, uno a las vestales, uno a los magistrados y el cuarto a los huéspedes de honor. Se distribuían en las graderías según la clase social. Existían tres órdenes de puestos: podium, era el primer orden, reservado a las clases más elevadas y al palco del emperador; el orden central acogía a los ciudadanos que pertenecían a la clase media; y el último orden, la suma, era el destinado al pueblo. Todos los asientos eran de mármol, excepto el más lejano (y cuya entrada era más económica) que eran de madera. Para facilitar la distribución del gentío, la entrada contaba con una ficha con información para llegar al asiento. Todos los arcos del segundo y tercer piso estaban adornados con estatuas, hoy perdidas.

En el interior del Coliseo romano, a la izquierda abajo se ve una pequeña reconstrucción de la ‘arena’, el lugar donde luchaban los gladiadores


Cuando en la Edad Media, el Coliseo se convirtió en una enorme mina de material para la construcción, le fueron extirpadas todas las grapas metálicas de sutura entre los bloques de travertino, originando innumerables agujeros aún hoy visibles. Las partes del edificio que faltan sirvieron para reconstruir otros monumentos. En la Basílica de San Pedro se encuentran piedras que pertenecieron al Coliseo romano. 

El Coliseo en la Antigüedad

Durante el Imperio Romano y bajo el lema de "Pan et Circus", el Coliseo Romano (conocido entonces como Anfiteatro Flavio) permitía a más de 50.000 personas disfrutar de sus espectáculos preferidos. Las muestras de animales exóticosejecuciones de prisioneros, recreaciones de batallas y las peleas de gladiadores acompañaron durante años al pueblo romano. El Coliseo permaneció en activo durante más de 500 años. Las luchas entre gladiadores terminaron hacia el año 404, mientras que aquellas entre animales continuaron hasta el s.VI. Los últimos juegos de la historia fueron celebrados en el siglo VI. A partir del siglo VI el Coliseo sufrió saqueos, terremotos e incluso bombardeos durante la Segunda Guerra Mundial. Las familias romanas de los Frangipani y de los Anibaldi lo hicieron su fortaleza, hasta que en el 1312, por orden de Arrigo VII, el Coliseo volvió a ser propiedad del pueblo romano. En el 1750, Benedicto XIV lo declaró lugar santo, por haber sido teatro del martirio de los cristianos evitando posteriores expolios; una cruz negra, de madera, conmemora la fe y la fortaleza de los mártires que dieron en este lugar su vida por el nombre de Cristo; entre estos cabe citar a San Ignacio, obispo de Antioquía y discípulo de San Juan, enviado a las fieras bajo Trajano (98-117); bajo este mismo emperador murió crucificado, a la edad de 120 años, el obispo de Jerusalén Simeón, uno de los parientes del Señor que mencionan los Evangelios. El Coliseo fue utilizado durante décadas como almacén, iglesia, cementerio e incluso como castillo para la nobleza.



































El Coliseo en la Actualidad

Actualmente el Coliseo es, junto con el Vaticano, el mayor atractivo turístico de Roma. Cada año es visitado por 6 millones de turistas. Fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, y el 7 de julio de 2007 el Coliseo se convirtió en una de las Siete Maravillas del Mundo Moderno.


Curiosidades

  • El nombre original “Anfiteatro Flavio” fue sustituido por el de Coliseo debido a la gran estatua de Nerón que se encontraba situada en la entrada de la Domus Aurea, "El Coloso de Nerón". La Domus Aurea fue un gran palacio construido bajo las órdenes de Nerón tras el incendio de Roma.

  • El emperador Tito inauguró el Coliseo con 100 días de juegos, lo que costó la vida a más de 2.000 gladiadores a y más de 5.000 animales.

  • El Coliseo tenía un techo de lona para proteger a la gente del sol. Debajo de la arena se situaban la maquinaria y las jaulas.

  • Existen diversas teorías sobre que el Coliseo se llenaba de agua para la representación de batallas navales, aunque por el momento no ha habido investigaciones concluyentes.

  • Cada Viernes Santo el Papa preside el Vía Crucis en el Coliseo. Siempre ha sido un lugar muy unido a la iglesia y este día se recuerda a los primeros cristianos que murieron en la arena.