PÓRTICO DE OCTAVIA
El complejo del Pórtico de Ottavia es el único conservado de los grandes pórticos que limitaban, en el lado norte, la plaza del Circo Flaminio, área que corresponde al antiguo gueto. Fue reconstruido por Augusto, en lugar del más antiguo Pórtico de Metello, entre el 27 y el 23 a.C. y dedicado a la hermana Ottavia.
Posteriormente fue restaurado y parcialmente reconstruido en el año 203 por Septimio Severo, después de un incendio de 191, período al que pertenecen en su mayor parte los restos visibles hoy en día.
El complejo, un pórtico cuadrado de 119 x 132 metros, incluyendo el más antiguo Templo de Juno Regina, al que fueron entonces flanqueados el Templo de Júpiter Estátor, el primero en Roma íntegramente de mármol, dos bibliotecas, griega y latina, y la Curia Octaviae, un gran ambiente para reuniones públicas.
Hoy en día, sólo quedan del complejo la esquina sureste y el vestíbulo de acceso.
Antiguamente, su interior se configuraba como una especie de museo al aire libre ya que albergaba una gran cantidad de obras de arte, entre las cuales destacaba la turma Alexandri, obra de bronce que representaba a Alejandro Magno y a sus caballeros, realizada por Lisippo.
En edad tardía y medieval, los espacios pórticos del monumento se utilizaron como mercado de pescado, caracterizando esta zona como Forum Piscarium o Pescadería Vieja, el principal mercado de la ciudad para la venta del pescado que permaneció activo hasta finales del siglo XIX. La piedra que está a la derecha del gran arco del Pórtico es todo lo que queda de ella. La inscripción latina en el arco habla de la tradición según la cual a los conservadores o a los magistrados del Capitolio se les debía dar cualquier pez, desde la cabeza hasta la primera aleta, cuya longitud era mayor que esta piedra.
En el último cuarto del siglo octavo, sobre las estructuras del pórtico y de los monumentos adyacentes se obtuvieron los ambientes de la iglesia de Sant'Angelo en Pescheria, que englobaron una de las columnas posteriores y parte del tímpano, aún visible dentro de la iglesia.
Fue desde el Pórtico de Octavia que Cola di Rienzo, político de la mitad del siglo XIV, partió para conquistar el Capitolio el día de Pentecostés de 1347.
El monumento es ahora accesible a través de un pequeño cordón en continuación de la calle del pórtico de Ottavia, a una rampa frente a las columnas de entrada, transitable también por los discapacitados y a una escalera que conecta el área del pórtico a la entrada de la iglesia de Sant'Angelo en Pescheria, y a un paseo que permite la conexión con los edificios de la calle de Foro Piscario y el cercano del Teatro Marcelo.
TEATRO DE MARCELO
Construido por César y Augusto, semeja un pequeño Coliseo. Hoy quedan sólo dos filas de arcadas, rematadas por un palacio de época renacentista.
TEMPLOS DE APOLO SOSIANO E DE BELLONA
A la derecha del Portico di Ottavia, en el barrio judío, se encuentran los restos de un templo dedicado al Dios Apolo, edificado entre 433 y 431 a.C. tras un tiempo del plaga y consagrado a Apollo Medicus. Mas tarde el templo se llamará también Sosiano por el nombre del consul Gaio Sosio quien, en 32 a.C., lo reconstruirá totalmente enriqueciendolo de muchas obras de arte.
El edificio surgía sobre un podio de grande tamaño, con semicolumnas adjuntas a cada lado de la celda. La celda contenia numerosas obras de arte, al punto de hacer de ella un verdadero museo de la epoca donde a menudo se realizaban reuniones del senato y otros eventos publicos. La reconstrucción del frontón del templo de Apolo Sosiano, con la representación de la batalla entre griegos y amazonas con Eracle y Teseo a la presencia de Atena y Nike, es hoy en dia visible en el museo de la Centrale Montemartini. Las esculturas del marmol que fueron traidas a Roma en la edad Augustea para decorar el templo, son valiosos originales griegos. También un pequeño monumento circular del area entre el templo y el teatro di Marcello, ha sido parcialmente recompuesto, quizas identificable con una cuenca de agua lustral
Al lado del templo de Apolo Sosiano, se encuentran los restos del templo de Bellona, construido por Appio Claudio Cieco y dedicado en 296 a.C a la antigua diosa romana de la guerra tras vencerle a los Etruscos. También aquí se realizaban muchos eventos publicos; el Senato aquí se reunia para encontrarse con los magistrados con un “imperium” quienes tenian prohibido cruzar la frontera, y los generales triunfadores por los cuales habia que decidir un premio. A principio de la guerra contra Pirro, fue colocada frente al templo la “columna bellica” donde se llevaba a cabo el ritual simbolico de la declaración de guerra.
A finales de los años ‘30 en ocasión de las escavaciones para la rencostrucción de la iglesia de Santa Rita, se descubrieron los restos de un porche que corría a lo largo del lado este y norte del templo de Bellona. El porche está hecho por una doble fila de pilares, hechos en parte por peperino en parte por ladrillos, conectados por arcos redondos y el piso es de hojas de travertino. Posiblemente la construcción fue parte del sistema de porches del Foro Olitorio.
ÁREA SACRA. LARGO DI TORRE ARGENTINA.
Corresponde a lo que fue la zona central del campo de Marte, donde unas excavaciones realizadas entre los años 1926 y 1930 revelaron los restos de cuatro templos (tres de planta rectangular y uno circular) que constituyen uno de los pocos complejos arquitectónicos existentes de la Roma republicana y las ruinas de los templos más antiguos que se conservan en Roma. Actualmente está cerrada al público.
El descubrimiento
El Área Sacra fue descubierta entre 1926 y 1930 durante los trabajos de construcción de un edificio. La zona estaba ocupada por cuatro templos construidos en el siglo III a.C., y por el teatro y la curia de Pompeyo, lugar en el que fue asesinado Julio César.
Como se desconoce a quiénes estaban dedicados los templos, estos fueron renombrados con las letras A, B, C y D.
La ciudad de los gatos
En la Plaza Largo di Torre Argentina al norte del ghetto judío, se ubican los restos del Teatro del Pompeyo y unos cuantos templos de tiempos de la república. Y en esta plaza hay dos curiosidades que merecen la pena su visita:
– La primera es histórica. En la curia del Teatro de Pompeyo fue asesinado Julio Cesar en el año 44 a.C.
También se localiza una colonia de gatos que campa por las ruinas, e incluso en la misma plaza hay un refugio de voluntarios que se dedica a cuidarlos.
Desde que se realizaron las primeras excavaciones en el Área Sacra, cientos de gatos decidieron convertirla en su hogar. En la actualidad es muy común verlos andando a sus anchas entre las ruinas, sintiéndose protegidos.
Junto a las verjas que protegen la zona se pueden ver carteles indicando que los gatos son bienvenidos y que no hay que maltratarlos. la Torre Argentina, en una excavación de los años 20 y un lugar en el que fueron alimentados por los residentes durante décadas. A principios de los 90 se abrió un refugio en la plaza en el que ahora viven unos 400 recibiendo los mimos de voluntarios locales.