Se encuentra en la provincia de Badajoz, comunidad autónoma de Extremadura, en la comarca de Vegas Altas entre Don Benito y Mérida en la orilla izquierda del Guadiana, al pie de un cerro que emerge en la planicie dominando el entorno, donde desemboca el río Ortigas en el Guadiana, originando ambos cauces un amplio vado donde se asienta.
Vistas desde el castillo |
Su localización al resguardo de la colina y a la orilla de los ríos confieren al enclave importancia estratégica muy destacada, permitiéndole controlar los itinerarios de la zona.
HISTORIA
Prehistoria: en las cercanías de Medellín se han localizado hallazgos aislados de industria lítica tallada que a pesar de estar en contextos segundarios parecen corresponder con herramientas de época paleolítica (1.000.000- 10.000 años a. C.).
Calcolítico: se han descubierto algunas evidencias arqueológicas (hogares, cerámicas, etc.) que parecen atestiguar la existencia de ocupaciones humanas desde al menos el III milenio a. C en adelante.
Edad del Bronce: se han detectado y documentado algunas evidencias arqueológicas (hogares, agujeros de postes, vertederos, etc.) que manifiestan un mayor nivel de ocupación humana de este enclave durante el desarrollo de esta época. Entre ellos habría que destacar el descubrimiento de varios hogares in situ siendo datados algunos de ellos entorno a los siglos XIV-XIII a.C.
Desde el siglo VI a.C. hay constancia de pobladores en los alrededores de la actual Medellín gracias a los restos encontrados en un yacimiento conocido como la necrópolis llamada Conisturgis, de época tartésicas, capital de los conios y destruida por los lusitanos. Ocupaba unas 15 ha. bajo el Cerro del Castillo y parte de la población actual. Según los geógrafos griegos Herodoto (IV,49,3) y Estrabón (III,2,2), Conisturgis era el último núcleo urbano de Occidente. Su nombre indica que fue la capital de los Conios, último pueblo antes de los Celtas que habitaban el extremo Occidente, desde las tierras montuosas de Extremadura y la Meseta hasta el Atlántico. Conisturgis fue una floreciente ciudad tartesia, fundada probablemente por gentes de Carmo (Carmona, Sevilla), para controlar un importante paso del río Guadiana y las feraces Vegas Altas. De todas las piezas encontradas, hay una de gran valor: un kylix. Se trata de una especie de copa en la que los fenicios, tartesos y griegos bebían vino. Una copia de esa copa se conserva en Medellín, pero para ver el original hay que visitar el Museo Arqueológico Nacional.
La actual Medellín se llamó Metellinum fue fundada por el cónsul romano Quintus Caecilius Metellus Pius como campamento militar en el 79 a.C., posiblemente en el marco de las guerras de la República de Roma contra Sertorio. Llegó a obtener el rango de colonia, se cree que bajo Julio César, circunstancia que tan sólo otras cuatro ciudades de la provincia romana de Lusitania consiguieron obtener: Emerita Augusta (Mérida), Norba Caesarina (Cáceres), Scallabis (Santarém – Portugal), y Pax Iulia (Beja – Portugal). Se urbaniza siguiendo los modelos itálicos, aterrazando la ladera meridional del Cerrro del Castillo mediante fuertes muros de contención. Sobre esas plataformas se edificaron numerosos edificios públicos. Se cree que fue la mayor población extremeña hasta la fundación de Mérida varias décadas más tarde. Este emplazamiento es nombrado por Plinio junto a las colonias de Emerita y Norba y aparece reflejada en el Itinerario de Antonino
Estatua en honor a Quintus Caecilius Metellus Pius |
La presencia visigoda se hizo notar merced a la influencia irradiada desde Mérida, como lo prueban diversos restos epigráficos y la necrópolis hallada al sur de la actual población. De época visigoda cabe destacar el fantástico ajuar funerario hallado en la finca "El Turuñuelo", cuyo elemento más señero está representado por un medellón de oro en el cual se lee, en griego, una oración que invoca la protección de la Virgen María. El resto de las piezas, junto con la mencionada, reposan en el Museo Arqueológico Nacional de Madrid.
Los musulmanes llegaron a Medellín en el siglo VIII. Construyeron su fortaleza en el cerro que domina la localidad, aunque poco queda de aquella construcción. Llamaron a su ciudad Madallin .
En 1234 fue conquistada por Fernando III. El Maestre de la Orden de Alcántara y el Obispo de Plasencia fueron personajes destacados en las operaciones, razón por la cual Medellín se integró en la diócesis placentina mientras que la Orden de Alcántara recibió el territorio conquistado en la vecina comarca de La Serena. Otra consecuencia de aquellas campañas fue la delimitación de los territorios entre las Órdenes de Alcántara y Santiago, separados por la Comunidad de Villa y Tierra de Realengo constituida en Medellín. En la primera mitad del siglo XIV el señorío de la villa fue ocupado por Juan Alfonso de Alburquerque, protegido de Pedro I de Castilla quien, sin embargo, le retiró más tarde la confianza llegando a destruir el castillo en 1354. A mediados del siglo XV Medellín comenzó a figurar como Condado siendo don Rodrigo Portocarrero su primer titular.
El conflicto dinástico entre Juana "La Beltraneja" e Isabel la Católica tuvo sus consecuencias en Medellín, pues la por entonces condesa, doña Beatriz de Pacheco, tomó partido por "La Beltraneja". Así, hasta el siglo XVI el castillo se fortaleció e incrementó sus defensas, ya que los monarcas procuraban mermar el poder de la nobleza que le era hostil, como sucedía con el linaje asentado en esta villa.
Medellín pasó a la historia por ser la cuna de Hernán Cortés (nacido alrededor de 1485), conquistador del Imperio Azteca y precursor del estado mejicano. El siglo XVI también marcó la expansión urbanística hacia el llano, abandonando paulatinamente la ladera del castillo. En esta época se evidencia una recuperación económica puesta de manifiesto en la construcción de distintos edificios religiosos y civiles.
Otra fecha referencial en la historia de Medellín es el 28 de marzo de 1809. En la mañana de aquel día se libró una encarnizada batalla entre tropas francesas al mando del mariscal Víctor y españolas bajo las órdenes del general García de la Cuesta. El desenlace fue negativo para el bando español, resultando una de las más severas derrotas sufridas en el transcurso de la Guerra de la Independencia. Como consecuencia, los franceses acamparon durante tres meses en la localidad, causando graves destrozos a su patrimonio monumental.
monumento a la batalla de Medellín |
Algo más de un siglo después, entre 1936 y 1938, Medellín volvió a ser frente de batalla durante la Guerra Civil.
La aportación a la colonización, evangelización y conquista en América, daría lugar a que otras ciudades de América llevaran este nombre. El toponímico de Medellín se encuentra en Colombia (Medellín es la capital del estado de Antioquía y la segunda ciudad del país, con dos millones de habitantes; también el nombre de un río cercano). En México, Colombia, Bolivia, Argentina y Filipinas, existen ciudades que llevan el nombre de Medellín.
RESTO DE ÉPOCA ROMANA
CONVENTO DE SAN AGUSTÍN
ERMITA DE FÁTIMA
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