Del 9 al 13 de mayo, se celebran
anualmente en Biar las Fiestas de Moros y Cristianos. Es una de las más
antiguas y singulares de cuantas se celebran en la Comunidad Valenciana.Rememoran
las luchas entre almohades y las tropas del Rey Jaime I el Conquistador en
1245, que con la conquista de Biar para la Corona de Aragón, marcando la
antigua frontera entre los Reino de Castilla y Aragón.
Cada año el 12 de mayo tras la
entrada Cristiana se representa la entrega de La Mahoma a la Ciudad de
Villena, donde permanecerá hasta el 8 de septiembre, cuando vuelve de nuevo a
Biar. Este intercambio ritual de La Mahoma entre ambas poblaciones está
documentado desde el año 1838, donde apareció en el "Semanario Pintoresco
Español”, aunque se sabe que su existencia es anterior. Según cuenta la
leyenda, porque antiguamente no había cárcel en Biar y los prisioneros iban a
la de Villena. Entonces, los dos pueblos acordaron que, en lugar de los
impuestos de prisión, Biar le dejaría todos los años la Mahoma. Desde
entonces el alcalde de Villena, acompañado por representantes de los moros,
sube el día 12 de mayo con un pregón para recogerla y llevarla a
Villena donde es recibida con salvas de arcabucería y el día 8 de
septiembre, cuando los moros pierden, la devuelve al pueblo de Biar, donde le
esperan en la Torreta para pasear por todo el pueblo con la música de los
espías.
Los biarenses despiden a
la Mohama con el siguiente dicho: “La Mahoma de Biar, menjarotllets i fogasses,
se l´emporten a Villena i la inflen a remolatjes”.
La Mahoma es una gigantesca figura, heredera de
la tradición aragonesa de los gigantes y cabezudos, que se usa
en las fiestas de Moros y Cristianos de varios municipios de la Comunidad
Valenciana, aunque en otros se ha dejado de utilizar para considerarse ofensivo
para la religión musulmana.El trato femenino del término puede deberse a
una omisión de una palabra femenina intermedia (la estatua / esfinge / figura
de Mahoma), a una atracción popular, ya que el término termina
en a, oa una combinación de ambas. Consiste en una figura de gran
cabeza, articulada y vestida con el traje tradicional de moro, que representa
al profeta Mahoma. Se coloca en el castillo en que se realizan
las embajadas durante el espacio de tiempo que va entre la embajadada
mora y la cristiana, simbolizando de esta manera el
dominio musulmán de la población. Se retira al acabar la embajada
cristiana, ya que la victoria de éstos simboliza que el castillo vuelve a
ser cristiano
No hay comentarios:
Publicar un comentario