CASTILLO DE REBOLLET
Se encuentra a unos 1340 metros al sudeste del municipio, se encuentra el castillo de Rebollet teniendo su acceso por la carretera de la Font d'enCarròs-Oliva.
En este lugar, se asentaron numerosas civilizaciones que habitaron en
nuestro territorio. Además, también se han encontrados restos de materiales que
pertenecían a la edad de bronce, así como también restos de la civilización
romana. Todos estos poblados se asentaron en esta zona debido a la estrategia
del lugar, ya que es uno de los puntos más altos del término.
Durante la reconquista del reino de Valencia por Jaime I de Aragón, uno
de sus caballeros, de origen probablemente germánico, En Carròs participó en la
conquista de Mallorca con sus naves. Después, también participó en la conquista
de estas tierras ganando el fuerte y rocoso castillo de Rebollet. Agradecido el
Rey por sus servicios, el año 1240 hizo merced a En Carròs del señorío del
castillo y villa de Rebollet. No abandonó la plaza dada la posición estratégica
que tenía, sino que fortificó el castillo, alzó en su recinto una iglesia, y
estableció allí su residencia familiar. En la iglesia de este lugar, depositó
la imagen románica de Nuestra Señora de Rebollet, la misma imagen que
acompañaba al señor Carros a las lides de la guerra.
Posteriormente, en el interior de la iglesia, dedicada a San Nicolás,
había una capilla dedicada a Nuestra Señora de Rebollet, otra a Nuestra Señora
del Remedio y un panteón con los sarcófagos de los señores Carròs.
El año 1598, en la comarca de la Safor, se produjo uno de los peores
terremotos conocidos hasta el momento. Muchos edificios fueron destruidos y
entre estos el castillo de Rebollet.
Unas de las pocas cosas que se salvaron fueron la imagen de Nuestra
Señora del Remedio y la imagen del s. XII de Nuestra Señora de Rebollet que en
la actualidad y después de muchos enfrentamientos entre Oliva y la Font se
encuentra en la iglesia de los religiosos franciscanos de Oliva, después que
los vecinos de la Font acudieron al tribunal eclesiástico de Valencia y este
tribunal dictara donde debía depositarse la imagen de la virgen.
En el mes de enero de 1747, un vecino de la Font, sacando piedras en el
recinto del Castillo, encontró los dos sepulcros que pertenecían a los Carròs y
que habían sido sepultados a causa del terremoto. Fueron bajados y depositados
en la iglesia de La Font d'enCarròs.
El acceso del castillo se sitúa en el extremo oeste del mismo y tiene una
entrada protegida por parámetros de ladrillo. Frente, encontramos la torre del
homenaje, probablemente del s. XV, hecha de ladrillo; parece probable que la
torre estaría formada por tres plantas y posiblemente cubierta por una vuelta
de ladrillo y cal.
Adosada
en los muros laterales de la torre se observa la muralla hecha de tapia de unos
67 metros de longitud.
Se encuentra en un pequeño collado conocido con el nombre de "monte de san Miguel". La singularidad de este collado es que todas las tierras circundantes corresponden a los términos municipales de Rafelcofer y L'Alqueria de la Comtessa aunque éste es propiedad de La Font d'enCarròs.
En este lugar han sido encontrados numerosos materiales arqueológicos de
diferentes etapas históricas, lo cual hace pensar que fue un lugar estratégico
para las diferentes civilizaciones que pasaron por estas tierras.
Su construcción se realizó en el lugar en que probablemente existían
restos romanos, convirtiéndose posteriormente en mezquita durante la invasión
árabe y después en iglesia - ermita cristiana. Hay documentos en que se
menciona que fueron encontrados restos romanos como, monedas, lápidas, restos
de estatuas y cerámicas.
En su cima se alza la ermita con un porche de tres arcos, frontón y
espadaña. El edificio de planta cuadrada está enladrillado con azulejos rojos a
lo largo de las paredes. La nueva imagen de san Miguel se encuentra en la
iglesia parroquial de La Font, debido a que la antigua fue robada al igual que
su campana. Cuenta con una casa adosada con puerta de arco curvado y cubierta
en dos aguas de tejas morunas que antiguamente era habitada por el ermitaño.
Hay documentos diversos, y memorias de gran valor histórico, en la que se habla
de la utilización, costumbres y anécdotas que tuvieron lugar en esta ermita.
Por ejemplo, que el ermitaño habitante de la casa, subsistía de limosnas, pero
cuando no eran suficientes, las arcas municipales se hacían cargo de él.
Hay la costumbre de visitar la ermita en romería cada año el día 29 de
septiembre para celebrar el día de san Miguel. Con motivo de esta celebración
la imagen del santo se lleva desde la Iglesia parroquial hasta la ermita. Allí
se celebra una santa misa en honor al santo seguida de un almorzar popular. En
otras ocasiones también se han hecho actuaciones musicales, conciertos y danzas
populares.
Desde 1980 a 1982 el Departamento de Historia Antigua de nuestra
Universidad ha realizado tres campañas de excavaciones y ha trabajado en una
gran superficie que le ha permitido exhumar una intrincada red de estructuras
de habitación de piedra en seco, así como recoger un considerable conjunto de
materiales arqueológicos. El Departamento en sus conclusiones finales
manifiesta que en el mencionado lugar existió una gran ciudad ibérica, con la
sospecha que el poblado ibérico sea la continuación de un poblado de la Edad de
Bronce Valenciana.
También
encontramos en la cima de la montaña una enorme cruz de metal, que sustituyó en
los años noventa al anterior que era de las mismas dimensiones, hecha de obra y
muy deteriorada 
Se encuentra en la parte más elevada del pueblo, sobre la roca viva de la
montaña y sobre una anterior mezquita árabe, fue construida la iglesia en el
año 1329, de estilo gótico y dedicada a Santo Antonino Mártir. Para su
construcción se utilizaron ladrillos de tejas de origen musulmán. En los siglos
XVII y XVIII, esta iglesia tuvo su primer ensanchamiento, se abrieron los muros
laterales entonces, y se construyeron capillas laterales de estilo renacentista
con las respectivas cúpulas.
En la iglesia están depositados los dos vasos sepulcrales del siglo XIV
que pertenecen a la familia Carròs (señores de la Baronía de Rebollet), que en
el 1747, un vecino del municipio encontró casualmente entre las ruinas del
castillo del Rebollet. El sepulcro de Francesc Carros I († 1343 en Cerdaña) al
lado izquierdo y el de Francesc Carròs II, su hijo, en el lado derecho. Los
sepulcros, grabados con inscripciones y escudos de la familia, fueron
depositados en la iglesia por orden de la duquesa de Gandía.
Finalmente, en el año 1792, se alzó la torre del campanario. Esta, es un
elemento que define y referencia el perfil de la población por ser una
estructura vertical que se encuentra situada en el punto más alto de la
población y que se puede apreciar desde la lejanía. Es de planta cuadrada, con
una base de 5,25 metros y una altura de 45 metros.
En el año 1890, se realizó una reforma, que consistió en el derribo de la
casa abadía, para la construcción de la capilla del Santísimo Cristo del
Amparo; si bien, con esta reforma perdió todo su primitivo aire gótico antiguo.
También se trasladó la capilla de la Virgen del Remedio y los sepulcros al
lugar actual. Originalmente, en esta espaciosa capilla, dedicada a Nuestra
Señora del Remedio, fue depositada una imagen bajada del castillo (desaparecida
en la guerra civil). Dicha capilla ocupaba el lugar que hoy en día es la puerta
principal. Aún podemos apreciar las riquezas de la cúpula barroca, en el techo
del corazón actual, que adornaba la capilla de la patrona del pueblo.
En la capilla del Santísimo Cristo del Amparo, de estilo neoclásico como
imperaba a finales del s. XIX, existen unas pinturas al fresco muy interesantes
en las conchas, obra de Remigi Soler (1930). Además, hay cuatro lienzos de los
siglos XVIII-XX. Preside la capilla la imagen del Cristo, realizada el año 1946
por el escultor valenciano Josep Maria Ponsoda. Es copia de la antigua talla
quemada durante la guerra civil, que había sido regalo del arzobispo Joan de
Ribera en compensación por la pérdida de la imagen de Nuestra Señora de
Rebollet y como solución del conflicto de 1601.
Destacan,
en los laterales del altar mayor, dos pinturas datadas en 1966 por el pintor
local Rafael Fuster Insa. En el lado derecho se encuentra el cuadro de la
"Transfiguración del Señor", y al lado izquierdo el cuadro de la
"Resurrección del Señor"
En la placita de san Antonio, se encuentra la ermita de san Antonio Abad . Está ubicada en un barrio de trazado medieval en el que se asentaba la morería del pueblo en la época musulmana, separada por el barranco que dividía el pueblo, separando las viviendas de los moriscos o cristianos nuevos y la de los cristianos viejos. Antiguamente, había una mezquita árabe que fue derribada durante la guerra de la Germanía (1521). Fue construida de nuevo y dedicada al culto cristiano, entre 1530 y 1580.
Entre los años 1936 y 1939 fue derribada según documentos encontrados en los archivos. Su reconstrucción fecha de finales de 1940, levantándose sobre el solar en que con anterioridad se asentaba el antiguo edificio de la ermita. La planta de la ermita es de forma rectangular, de 6,80 metros de fachada principal y 12,60 metros de profundidad; en el lado izquierdo, tiene adosado un cuadrado de 3,50 x 3,50 m, que corresponde en la sacristía.
EL PATRONATO
Edificio religioso que fecha del año 1921. Es un edificio de planta
cuadrada con claustro interior que sirvió para una congregación de monjas. Este
convento se utilizó durante varias décadas como colegio de la Pureza llevado
por las monjas de la mencionada congregación.Este edificio es propiedad de la parroquia. En la década de los noventa, fueron rehabilitadas las instalaciones de la parte baja y la techumbre del edificio que se encontraban muy deterioradas
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