jueves, 14 de agosto de 2014

DE PASEO POR OLIVA (I): PASEANDO POR LA VILA CONDAL


Oliva se encuentra situada al sur de la provincia de Valencia en la comarca de la Safor.
El topónimo proviene del árabe (Awrabatu), de posible origen prerromano. Posteriormente se la denominó Awriba o Awruba, y en valenciano alternaron los términos Oriva y Oliva hasta el siglo XVI, prevaleciendo éste último finalmente.
Está edificada en la vertiente oriental del cerro de Santa Anna, sobre la que se asientan los restos del castillo y la ermita que da nombre al cerro. Está formada por un extenso casco antiguo de morfología rural con barrios de casas humildes y otras agrupaciones, completada por los ensanches de trazados rectilíneos posteriores al siglo XVIII que se extienden por el llano. Hay cuatro barrios tradicionales: Santa María, SantRoc, El Pinet y Sant Francesc. El área más antigua corresponde al barrio de Santa María, donde se levanta la iglesia de Santa María la Mayor. Este espacio originario fue amurallado en el siglo XV por Serafín de Centelles con una cerca en la que se abrían los portales del Mar, del Molí, del Raval, del Pi y del Carme. En la parte más elevada se encontraba el palacio de los Centelles. A poniente de este núcleo se desarrolló a partir del siglo XIII la morería, o barrio del Raval, en torno a la mezquita que precedió a la iglesia de San Roque.A comienzos del siglo XVIII sus murallas fueron derribadas por orden de Felipe V como castigo por el apoyo de Oliva a la causa del archiduque Carlos de Austria.
Portal de la Virgen María
Es conocido popularmente como el portalet. Era una de las entradas al perímetro amurallado de la Vila anterior a 1529. En aquel año, el conde Serafí de Centelles inició la construcción de un nuevo  trazado de las murallas.para asegurar la defensa de la ampliación del recinto urbano primitivo y, en la misma prolongación de la actual calle Iglesia, se abrió otro portal, denominado del Raval, situado entre las casas 4 y 5 de la actual plaza Alonso.


 


El portalet está formado por un arco de medio punto, sobre el cual observamos un muro decorado, desde 1945, con los plafones cerámicos de la Inmaculada y san Francisco de Paula. En la parte superior todavía pueden apreciarse los grandes quicios que aguantaban las hojas de la puerta, cuyo acceso enlazaba con la antigua calzada romana que, por las actuales calles de les Tendes y SantVicent, conduce a Xàtiva.

Torre de la muralla 

Es una torre de cuerpo cilíndrico y fábrica de mampostería, la única que se conserva del lienzo de la muralla del s. XVI que subía desde el portal del Raval (en la plaza Alonso), y continuaba hasta el palacio de los Centelles, que también contaba con torres propias en sus esquinas; no en balde la calle se llama de les torres.
La muralla seguía el trazado dibujado por las medianeras posteriores de las casas de las calles Sant Miquel y SantRafel, bajaba a buscar el portal de la Mar (final del carrerMajor), seguía el recorrido de la carretera hasta el portal del Molí (en la calle del mismo nombre) y, nuevamente siguiendo la carretera, cerraba el perímetro en el portal del Raval.
La torre defendía el acceso a la Vila a través del denominado portal del Pi, hoy desaparecido. Recibía este nombre por encontrarse en la vía que conducía al convento franciscano de Santa Maria del Pi, destruido por el terremoto de 1598.


Palacio de los Centelles: El Palacio condal
Es una edificio gótico-renacentista de la primera mitad del s. XV, con importantes remodelaciones en el s. XVI, que repetía el esquema de los palacios valencianos de la época: de planta cuadrada con torres circulares en sus cuatro esquinas. Construido a base de mamposteria y ladrillo, poseía planta baja abovedada, patio central al que se accedía por el portal de entrada en el lado norte, y estancias bellamente ornamentadas. Fue edificado en los siglos XV y XVI, no se conoce la fecha exacta de construcción, alcanzando su aspecto definitivo con Francesc de Centelles, III conde de Oliva, al mismo tiempo que se refortificaron el Castillo de Santa Ana y las murallas esto es, a principios del s. XVI.
La sala de armas se encontraba en el primer pisa disponía de una rica decoración renacentista; con friso pintado al temple sobre placas de ladrillo, conservándose parte del mismo, así como restos de la techumbre, en Nueva York, en la HispanicSociety of America). En el primer pisasestacaba la cubierta con vigas de madera y bovedillas de ladrillo y yeso, decorada con motivos floreados, ángeles y medallones con dorados y colores verdes, marrones y negro. Las paredes estaban encaladas con las aberturas ricamente decoradas. Era también destacable la galería con columnas de mármol y bóvedas góticas, algunos restos se conservan en la Iglesia de Santa María la Mayor.
En 1871 el edificio fue vendido por La casa de Osuna  por 30.000 reales, que dedicó a mejoras en la iglesia de Santa María, iniciándose el proceso de deterioro. En 1882 se abrió la calle Palau atravesando el patio claustral, para lo que se demolió la escalera de honor. En 1917 el arquitecto danés E. Fisher compró buena parte de la construcción con la intención de trasladarla a Copenhague. Inició los trabajos, pero le ordenaron parar cuando fue declarado Monumento Histórico y Artístico por el gobierno español en julio de 1920. Las remodelaciones y obras sufridas por el edificio, el hundimiento de algunas partes por ruina, la expoliación sistemática, lo afectaron hasta desfigurar su fisonomía original.
En la actualidad, la mayoría de sus restos se encuentran ocultos en el interior de las casas de las calles Comare, Torres, Aula y Ducd’Osuna. A pesar de todo, aún se conservan casi la mitad de sus murallas, cuatro torres y numerosos vestigios de los aposentos de la planta baja y primera, una ventana geminada en el número siete de la calle Virgen del Carmen. En el Museo Arqueológico de la ciudad se conservan las columnas de la galería del patio, una fiel maqueta y los planos de 1920.


Torre de la calle de la Comare 

Esta torre se conoce popularmente, comoel Torrejó estaba destinada a defender el ángulo sudeste del palacio. De planta circular y fábrica de mampostería, conserva tres plantas, contiguas a otros tantos aposentos rectangulares del resto del edificio, y constituye un buen ejemplo de la confluencia de varias fases constructivas: una gótica, ligada probablemente al castillo feudal original, y otra de la primera mitad del s. XVI, cuando se introducen elementos del primer renacimiento. La torre fue restaurada en el año 1999, y alberga una exposición permanente sobre el palacio y su proceso de restauración.
Esglesia de Santa María la Mayor

Es resultado de distintas fases constructivas realizadas sobre el solar de la primitiva iglesia gótica, y de la cual se conserva una arcada en la zona del baptisterioconserva una capilla gótica restaurada y el arco apuntado gótico-mudéjar de una puerta.
La Capella del Roser y el campanario corresponden a la remodelación proyectada en 1683, pero la mayor parte del templo se edificó a lo largo del s. XVIII (1705-1787), y está considerado un magnífico ejemplo de la arquitectura valenciana de ese siglo: en él puede apreciarse la evolución desde el último barroco hasta el pleno neoclásico.
La iglesia posee tres naves y una espaciosa cripta (que ahora se usa como espacio expositivo), construida para salvar el desnivel existente entre la plaza de l’Església y la calle de les Moreres. La planta es rectangular, con una nave principal de cuatro tramos cubierta con bóveda de cañón, y capillas laterales cubiertas por cúpulas propias sobre tambores. Su esquema arquitectónico es una muestra del giro clasicista impulsado por los matemáticos Tosca y Corachán, tomando como modelo a Vignola y las iglesias romanas.
El alzado interior es uniforme, ordenado a base de pilastras estriadas y contrapilastras de orden corintio. Una de las singularidades del templo es la sobriedad de su interior, siguiendo los cánones academicistas del momento que buscan resaltar la belleza de la arquitectura sin profusión de ornamentos que la oculten. El transagrario está sustentado por contrafuertes que refuerzan el ábside, (que se plantearon como remedio estructural para evitar un nuevo hundimiento de la cúpula, ocurrido en 1755, durante las obras del templo),allí encontramos un conjunto de zócalos cerámicos del s. XVIII, y un exclusivo museo parroquial con ornamentos litúrgicos, piezas de orfebrería y tallas religiosas.

desde el castillo
desde el castillo
 
 
 
 

Ermita de San Vicente (Ermita de SantVicent)
Se levantó en 1726 sobre un antiguo portal de la muralla.Desde ella se cree que predicaba el santo
 
Calle de les Moreres
También llaman la atención los arcos apuntados que sostienen el transagrario, y que se plantearon como remedio estructural para evitar un nuevo hundimiento de la cúpula, ocurrido en 1755, durante las obras del templo.
Estos arcos lindan con la canalización de la séquia Mare, que trae el agua del río Serpis y entra en Oliva por la calle SantVicent. Un poco más allá de los contrafuertes, el agua era retenida en una balsa (de aquí el nombre de la plaza), para ser usada como fuerza motora del Enginy del s. XVI, donde se molía la cañamiel y se elaboraba el azúcar.
Antiguamente, la acequia estaba descubierta. En sus bordes se plantaron moreras (de aquí el nombre de la calle) para alimentar a los gusanos de seda que eran la base de la potente industria sedera valenciana del s. XVIII.
Desde la calle de les Moreres, una de las más singulares de Oliva por sus casas blasonadas

Otras:

Aula Mayansiana, S: XVIII, en ella se situó el aula de gramatica en 1769
 


Centro deportivo


Monumento a Gabriel Ciscar

 
 
 
Mercado
Mercado
 




Antigua casa del Mayans, S: XVII- XVIII
Antigua casa del Mayans, S: XVII- XVIII

 




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